Mes 3
Europa
ITALIA
La Strade Bianche fue una experiencia bonita. Es una carrera
diferente a todas las demás debido a los tramos de tierra. Nunca había hecho
carreras con tramos sin asfalto y esa fue la primera vez que me metía en
caminos de tierra. El equipo tenía muchas ganas por Alejandro. Nos tocó
trabajar y yo hice mi trabajo hasta la mitad de carrera donde puse pie a
tierra. Luego no le acompañaron las fuerzas a Valverde pero hicimos una bonita
labor.
En Larciano bien. Fue una carrera larga de 200 kilómetros y
con frío. Llovió todo el día. Al final Visconti corría en casa y estaba muy
motivado. Pudo hacer un podio. Fue muy bonito para él.
Las sensaciones en Italia han sido buenas. Son carreras de
cierta envergadura en las que te habitúas a los viajes y demás. No había
corrido fuera de España salvo en Portugal y poco a poco te vas acostumbrando.
EN CASA
Descansé después de Italia. Luego he hecho unos
entrenamientos buenos de cara a las clásicas. Un poquito más de fondo, para que
el cuerpo se acostumbre a las largas distancias, pero sin exprimirme mucho porque
quiero estar fresco para el calendario que tengo ahora. Espero aportar bastante
al equipo.
La rutina ahora es diferente igual que las carreras son un
poco diferentes a cuando estaba en aficionados. Ahora tengo más entrenamientos y
también más descanso, el cuerpo lo agradece. Las carreras son más largas y hay
que recuperar un poquito más.
A mí me gusta el ciclismo desde siempre y las carreras las
sigo viendo igual. Ahora me fijo más en mis compañeros de Movistar. Viendo las
carreras por televisión tengo una sensación diferente. Sigo al equipo mucho
más, los resultados que se consiguen y los apoyo desde casa. Los corredores que no estamos en carrera la seguimos como un
aficionado más. En cada carrera los directores hablan con los corredores que
están compitiendo. Los demás que estamos fuera, lo vemos por televisión y
apoyamos al equipo, pero no sabemos la estrategia que van a seguir cada día.
BÉLGICA
Estaba en Barcelona para viajar y media hora antes de volar nos dijeron lo que había pasado, nos contaron lo del atentado. Se anularon todos los viajes a Bégica. Lo mejor era volver a casa porque no se sabía si iba a haber carrera o no. El jueves siguiente volé para correr viernes y domingo.
Correr en Bélgica ha sido una sensación muy diferente al
resto de carreras en las que he competido. Hay mucho público y desde la salida
se vive la tensión. La gente en la salida y la neutralizada busca coger buen
sitio para poder coger la escapada. Y con el pavés todo es muy diferente. El equipo buscaba sobre todo ir bien colocado. Esto es muy
difícil porque son carreras de mucha tensión. Aunque no había un jefe claro,
siempre hay corredores como Andrey Amador o Ventoso que son más o menos los jefes
para ese tipo de carreras. En mi caso, mi objetivo era intentar meterme en la escapada
y llegar lo más lejos posible. Aunque la escapada es muy difícil ya que los equipos
belgas se pelean mucho por cogerla debido al prestigio de las carreras allí.
Pasando con la grupeta vi el accidente. Había varios
corredores bastante graves pero no sabía que Antoine Demoitié estaba ahí. Es una cosa
con la que habría que acabar. He visto en estas carreras que el número de motos
es excesivo y si además rodamos por carreteras estrechas con pavés, la
peligrosidad aumenta. En el pelotón siempre se habla sobre este tema de las
motos y los coches. Los adelantamientos que hacen son peligrosos.
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