Euskadi Basque Country Murias 2016

CARLOS VILLALBA 

Ciclismo Sobre Letras ha querido conocer cómo ha sido el inicio de temporada del equipo Euskadi Basque Country-Murias. La mejor forma para hacerlo es de la mano de los propios corredores.

Después de correr la Vuelta a Andalucía, descansando ya en casa, Garikoitz Bravo me atiende al teléfono. Me regala una conversación amena y me sorprende su forma de hablar. Este año el equipo ha depositado mucha confianza en él. Esos galones que le han otorgado se reflejan en la forma que tiene de hablar sobre su equipo, sus compañeros, los patrocinadores y sobre su jefe. Durante la charla tengo la sensación de hablar con un líder. Se expresa como tal y el equipo quiere que lo sea. La carretera y sus piernas decidirán.

¿Cómo ha ido la concentración del equipo?

Hicimos una concentración en Benidorm antes de Mallorca. Estuvimos allí cuatro días, en los que hicimos test de 20 minutos en el puerto de Tudons para comparar los datos con respecto a los del año pasado. Todos en el equipo hemos dado un pasito y los valores han sido mejores que los de la temporada pasada. Eso quiere decir que el equipo está haciendo las cosas bien y los corredores estamos poniendo todo de nuestra parte para seguir creciendo y mejorar como ciclistas. También fue la primera toma de contacto con los corredores nuevos que habían venido al equipo como Mikel Iturria, Alex Aranburu, Pello Olaberria y Aitor González. Nos conocíamos todos más o menos así que super bien. También realizamos un buen entrenamiento de fondo de 200 kilómetros con mucho desnivel.

En cuanto a material, creo que hemos dado otro pasito. Este año se ha incorporado ORBEA. Tenemos las bici tope gama, ORBEA Orca con Dura-Ace electrónico. Es un buen salto, porque equipos continentales con un material así, hoy en día ya no hay. A muchas marcas no le sale rentable que usemos lo mejor en un equipo pequeño como el nuestro. En ese sentido ORBEA se ha portado muy bien. Las bicis son una maravilla. Una bici de 10.000 euros en un equipo continental…la verdad es que es un chollo. La gente está muy contenta. En cuanto a la ropa, este año trabajamos con KALAS que es de la República Checa y en ese sentido hemos notado otro pasito. Si el año pasado estábamos un poquito más escasos de ropa, este año si que tenemos para jugar con los diferentes modelos de prenda. KALAS se ha portado muy bien también. Hay marcas que te dicen que te van a dar diez culotes y diez maillots, pero luego te dan dos y dos. Este año estamos genial. En ese sentido el equipo también está creciendo. Sabe mejor cómo hacer estas cosas. Qué tener o con qué andar. SPIUK también se ha metido en temas de ropa de calle, cascos y gafas. El color de la ropa este año es más guay que el del año pasado. Es un verde más fuerte. La bici también es más personalizada, con el color del equipo. La verdad es que en ese sentido damos muy buena imagen.

¿Qué directrices teníais los corredores para la Challenge de Mallorca?

En Mallorca éramos nueve corredores. Todos los días corrían ocho. Cada día había uno que se quedaba fuera. En principio yo voy a hacer todo el calendario, seré el que más compita. El objetivo es aprovechar todas las carreras al máximo. En Mallorca, los cuatro días metíamos a uno en la fuga. Eso nos da mucha visibilidad con la que conseguimos mucha publicidad. Estévez se metió en una fuga del día, ganó la montaña…otro día Eneko Lizaralde ganó también la montaña. El día fuerte tenía que estar yo delante y al final me vi bastante flojillo. Falta de ritmo todavía. Iba bien, pero me faltaba ese punto. Cuando por ejemplo un Valverde, un Ion Izaguirre, o un Kwiatkowski, en la quinta hora siguen igual que en la primera, yo ya no. Si noté que todavía me faltaba ritmo. Entrenando voy bien y creo que poco a poco iré cogiendo el ritmo.

Puesto 28 por delante de Dayer Quintana, José Herrada y Alberto Losada, ¿qué balance haces de la vuelta a la Comunitat Valenciana?

Bastante bueno. De esa Vuelta hago un balance positivo. La pena fue que tenía que reservarme durante todos los días y el primero, que terminaba subiendo,  acabé a 5 segundos de Poels. Al principio de temporada, por mucho que quiera andar, nunca consigo estar bien. Me suele costar arrancar bien. Después de la crono, y del primer día que se terminaba para arriba, en el segundo me escapé. Quería ayudar al equipo para que cogieran la fuga y tontamente cogí yo la escapada. Pero claro, era una etapa de 200 kilómetros, no relevaban mucho y quieras que no te desgastas. Nos pillaron, llegamos al sprint y al día siguiente venía la de Xorret de Catí. Rampas del 20-23-25%. No iba tan mal pero me faltaba un puntito. Aún así, el 28 en la general no está tan mal teniendo en cuenta que me suele costar arrancar hasta coger el ritmo. Analizando, empiezas a mirar un poco la contrarreloj, que normalmente si no la he preparado bien, no me sale bien. Ahí se podría recuperar un poco de tiempo. Si quitara el día que estuve de fuga también tendría ahí otro puntito más. Fui el primer corredor de un equipo continental y bueno, tampoco está tan mal. Aunque hay que aspirar a más. Hay que hacer un 10 o un 15. Eso sería otra cosa teniendo en cuenta con la gente que corría allí.

En Murcia entraste en una grupeta de lujo con Samuel Sanchez y Jose Joaquin Rojas entre otros, ¿Cómo estabas de piernas?

Ahí genial. En Collado Bermejo coronamos veinticinco corredores y siete de ellos eran del BMC. Bajamos camino de la Cresta del Gallo, el último puerto antes de meta, ¡era una barbaridad! Tiraba todo el BMC a sesenta por hora (risas) te llevan a esa velocidad y encunetado…una pasada. Verme ahí con todos aquellos corredores me motivó mucho. Luego, igual que en Mallorca, en la Cresta del Gallo me faltó un puntito. En la quinta hora ves que vas flojeando un poquito, pero bueno, es falta de ritmo.

En Mallorca estaba más verde y sufría más. El día duro de Mallorca, subimos un puerto que se llama Puig Major, que eran alrededor de 30 minutos, y luego también se subía Soller. Allí iba un poco más obligado. Las piernas como duras, y necesitas esa sensación de agilidad en las piernas. Día a día si me las encuentro más ágiles y mejor. En Murcia, Collado Bermejo lo pasé sin problemas. Fue en la Cresta del Gallo donde me faltaba algo todavía que los más fuertes ya tienen. Pero me quedo contento. El año pasado en Mallorca me quedaba en el plano. Después de diez meses sin correr, estando en Portugal y parando muy pronto, acusé la falta de ritmo en competición. Este año he empezado un poco mejor y me va a costar menos coger ese punto.

¿Qué valoración hace el equipo del arranque?

El equipo creo que ha dado un salto con respecto al año pasado. Tenemos dos o tres corredores que están andando muy bien, Imanol Estévez e Iturria por ejemplo. A Txoperena le está costando un poquito porque está teniendo muy mala suerte. El chaval ha estado acatarrado y se cayó también en Andalucía. Cuando esté bien se que va a coger buen nivel. A Bizkarra también le está costando un poquito, está también medio enfermo. A nada que nos pongamos bien, vamos a andar unos cuentos y vendrán mejores resultados.

El equipo está muy contento. En Mallorca cuatro días escapados, la montaña, las metas volantes, en Valencia también anduvimos escapados…falta rematar. Queremos ganar que es lo más importante. Odriozola nos está transmitiendo mucha fuerza, mucha energía, y creemos que alguno de nosotros va a levantar los brazos. Hay que aspirar a eso. Tenemos que pensar en eso, que vamos a ganar un día. El otro día a Estévez le pillaron a dos kilómetros de meta en Andalucía. Si hubieran llegado, él era el corredor más fuerte del grupo. Tuvimos mala suerte. El último día de Andalucía Estévez y yo nos metimos en una fuga de salida, pero algunos equipos que no meten a corredores en la fuga, como castigo o lo que sea, son obligados a tirar la escapada abajo. Al final ellos no hacen nada y nosotros tampoco. Todo iba a salir perfecto. Nos metimos los dos en una fuga de salida que el BMC permitió pero nada. Después de eso fue una etapa muy dura, cuatro mil metros de desnivel. Fue más o menos una etapa reina de la Vuelta a España por decirlo de alguna manera.

¿Cuáles son los objetivos del equipo para el 2016?

Teniendo en cuenta que somos un equipo continental y pequeñito, imagínate que pasado mañana ganamos una clásica en Francia. Da igual si es una Copa de Francia o una carrera normal, no hemos ganado ninguna carrera. Esa sería la primera victoria para el equipo. Cualquiera sería bienvenida. Personalmente, me gustaría estar mejor en la Vuelta a Asturias, en Castilla y León o en la Clásica de Ordizia. El año pasado me fue bien en Asturias e hice quinto en la general. En Ordizia hice octavo. Es la clásica de casa para mí y me gustaría estar bien.  En Castilla y León gané la montaña y vi que era un terreno que se me adaptaba muy bien. A otro le gustaría estar mejor en Amorebieta, a otro en el Premio Indurain, etc. Yo sí tengo que aprovechar bien las carreras. Tengo veintiséis añitos y Odriozola me exige que haga buenas carreras. No hablo de ganar las metas volantes y la montaña, sino de hacer buenos puestos. La verdad es que Odriozola me está transmitiendo mucha fuerza y voy a por ello. Ahora tendremos una Vuelta muy buena, la Vuelta a Portugal, donde vamos a correr y esa también será una vuelta muy bonita para nosotros. Lo que más nos gustaría sería correr la Vuelta al País Vasco este año, pero va a ser difícil. Imposible no, pero muy difícil. El sueño principal que tiene el equipo, y Odriozola, es dar el salto a un conti-pro en el futuro y correr carreras como la Vuelta al País Vasco, la Vuelta a España o el Tour de Francia. Con el apoyo de todos, y nosotros haciendo las cosas muy bien, sacando resultados, seguro que esto se va a ir animando y subiendo para arriba.

Odriozola confía en que vamos a hacer algo grande. El otro día ya nos dijo a un compañero y a mí que íbamos a traer el mejor resultado hasta ahora en el equipo. Eso está bien, a veces tienes directores en el equipo que no te dicen nada. Nunca te unes con ellos, siempre están callados y al final tienes que tener ese contacto con tu jefe. Es muy importante. Vamos bien, a ver si sale algo.

Los continuos desplazamientos de los ciclistas me privan de poder hablar por teléfono con Mikel Iturria. Aún así, quiere participar en la entrevista y yo estoy encantado de poder contar con una de las nuevas incorporaciones del equipo. Ha llegado fuerte, el propio Garikoitz señalaba las buenas sensaciones que estaba transmitiendo el nuevo fichaje.

¿Qué tal ha sido la vuelta a los más grande después de tu fugaz y exitosa temporada en amateur?

La verdad que bastante bien. Estoy contento de cómo me ha ido la cosa, sabiendo que mis objetivos vienen mas tarde a partir de abril.

¿Cómo ha sido tu pretemporada?

Muy buena. Creo que he hecho una gran base para afrontar con garantías la temporada. Hasta enero hemos tenido muy buen tiempo en el País Vasco y eso ha ayudado mucho.

¿Qué acogida has tenido en el Euskadi Basque Country-Murias?

Conocía prácticamente a todos en el equipo, así que todo ha sido muy fácil. La acogida ha sido buena desde el principio.

¿Algún susto en la Clásica de Almería?

Algún susto sí que hubo pero por suerte solo se quedo en eso. La verdad que fue una pena no poder hacer la carrera en condiciones normales.

¿Qué sensaciones has tenido en la vuelta a Andalucía?

Nunca había corrido una carrera con tanto nivel y la verdad que las sensaciones han sido bastantes buenas. Nos vendrá bien esta carrera como preparación.

¿Qué objetivos te ha marcado el equipo para esta temporada?

Mis objetivos están en abril, mayo y junio. Y luego veremos si hago la Volta Portugal u Ordizia, Getxo y Vuelta Burgos. Aunque creo que en este equipo no se puede desaprovechar ninguna oportunidad y hay que salir a tope en todas las carreras.

Si tuviera que elegir una palabra para definir al Euskadi Basque Country – Murias me quedaría con la palabra ambición. Su proyecto es grande y el equipo cree en él. Su primer objetivo, levantar los brazos.